José Domingo Hernández "Machuca". Foto cortesía de Ramón Alfredo Corniel
José Domingo Hernández era su verdadero nombre, la gente comenzó a llamarlo a secas "Machuca". El sobrenombre se lo endilgó la legendaria cuerdita de los trabajadores de la suela del barrio "Las Tablitas", y así se quedó hasta el final de sus días, nunca rechazó ese epíteto, lo recibía con cariño.
Vengo a recordar a este paisano y gran amigo, quien toda su vida, en lo
claro del día y madrugadas, ejercicio el oficio de fabricar la famosa alpargata
villacurana.
José Domingo tuvo una tradición por más de cincuenta años en la confección de este
calzado, en un tiempo cuando estaba en pleno apogeo la producción y uso
de este calzado en Villa de Cura en los años cincuenta del recien pasado siglo.
Desde la puerta de la casa, o en las periódicas visitas a doña Ana Gregoria, uno lo veía sentado en
guardacamisa, cociendo, maceteando, ruleando, en medio de un montón de
docenas de alpargatas ya listas.
Desde tiempos remotos se cree que beber no es pecado..A veces, inspirado en su trabajo se echaba los palitos de "caballito
frenado", pero siempre estaba pegado en su faena..Su taller estaba ubicado al lado de la
Tipografía J M, donde se imprimía el célebre periódico "El Cotejo Mocho".
A cualquier hora del día trabajando sin descanso, toda su vida fue
trabajar para que salieran docenas y más docenas confeccionadas por las manos de este artesano; trabajaba por cuenta propia a esfuerzo propio, todas la producción que lograba hacer hacía negocio con los distribuidores mas conocidos, Esteban
Vera, Arturo González Victor Perdomo y Alfredo Gutiérrez, se ganaba la vida y al mismo tiempo levantar una familia numerosa. Para muchos
entendidos fue uno de los mejores maestros del arte.
En la adolescencia "Machuca" práctico béisbol en la sabana de la villa, defendiendo los jardines con el equipo del Sindicato de la Suela, bajo las ordenes del manager el señor Manuel Luna.
Lo cierto es que José Domingo Hernández era un hambre de
corta estatura, trigueño, .de cuerpo fuerte, tenía fama de peleón a puño limpio desde
chiquito, aunque acostumbrado a recogerse temprano.
Les cuento alguna de sus travesuras. Un atardecer de "lunes de zapatero", se fue de farra con unos amigos, se pararon en un bar lupanar situado en la carretera de San Juan de los Morros, y en un enfrentamiento le propinaron una herida
cortante, que por poco no.pasó el páramo. Se dijo que un famoso doctor de guardia en el viejo nosocomio "doctor José
Rangel", lo operó y le sanó las heridas.
José Domingo era un hombre de extraordinaria sencillez le sobraba la chispa y sus ocurrencias de humor. Me contaron que cuando lo sacaron de alta del hospital, rodeado de de familiares y amigos, dijo esta frase "Me
sacaron la miel", la miel de abeja que había comprado aquel "lunes de zapatero".
Nació un 14 de noviembre de 1935 en Villa de Cura, hijo de la unión de don Marcos Machado y doña Ana
Gregoria Hernández. Su adorada madre era tía de Isbael, mi esposa.
José Domingo Hernández contrajo matrimonio con la joven villacurana Flor Peña, nacieron 9
hijos, 6 varones y 3 hembras.
Como sucede siempre en la travesía de la vida llegaron las enfermedades, su vitalidad fue perdiendo fuerzas. "Machuca", un símbolo de la alpargatería en Villa de Cura, falleció en
esta comunidad el.3 de julio de 2018 frisando los.83 años de edad, ...Que en paz
descanse.
Oscar Carrasquel. La Villa de San Luis Tricentenaria
Colaboradores en la recopilación de datos, Aida Hernández, su hija, foto del laboratorio fotográfico de Ramón Alfredo Corniel.
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